Las fobias son un tipo de trastorno de ansiedad que se caracteriza por un miedo intenso y desproporcionado ante objetos, animales o situaciones concretas que representan poco o ningún peligro real.
Este miedo puede ser tan extremo que lleva a la persona a hacer cambios en su vida diaria, a evitar situaciones para así evitar el objeto temido.
La mayoría de las fobias son aprendidas en la infancia e influyen factores sociales y culturales. Por eso, gran parte de la población suele tener miedo a ciertos objetos como las cucarachas, perros grandes, etc.
¿Cómo saber si tienes una fobia?
¿Y cómo sabemos si tenemos una fobia? Para saberlo podemos considerar si nos sentimos identificados con los siguientes puntos:
- Miedo intenso y persistente a un objeto, a una situación o actividad específica.
- La respuesta de miedo es muy inmediata y muy intensa y ocurre en cuanto nos encontramos con el objeto o la situación temida.
- Tendemos a evitar el objeto o la situación, debido a la ansiedad que nos produce.
- El miedo interfiere con nuestra vida diaria, ya sea a nivel de trabajo, a la hora de socializar, etc.
- Tenemos síntomas físicos como sudoración, taquicardia, etc. cuando nos encontramos con el objeto o la situación temida.
- Puede que reconozcas tu miedo como irracional o excesivo, y aún así sientes que no puedes controlarlo, que siguen apareciendo los síntomas, que tiendes a evitar y puede afectar en tu vida diaria.
Tipos de fobias
Existen dos grandes grupos de fobias: las complejas y las específicas. Las fobias específicas producen ansiedad extrema o pánico cuando la persona se expone a un objeto específico.
Algunas de las fobias específicas más comunes incluyen el miedo a los espacios cerrados, abiertos o con muchas personas, a los túneles, conducir en autopistas, el agua, volar, los animales y la sangre.
Las fobias complejas se caracterizan por un miedo o ansiedad intensos relacionados con situaciones específicas. Las fobias complejas más comunes son:
- Agorafobia: miedo a encontrarse en situaciones en las que puede ser difícil escapar y no disponer de la ayuda necesaria en caso de que lo necesite, como en un ataque de pánico u otros síntomas incapacitantes y vergonzosos.
- Fobia social o trastorno de ansiedad social: miedo a ser juzgado negativamente en situaciones sociales cotidianas, como hablar en público, asistir a fiestas o reuniones, o interactuar con otras personas. Este miedo puede ser tan intenso que la persona puede evitar estas situaciones o sentir ansiedad y miedo cuando se ve obligada a participar en ellas.
Estas fobias son las más comunes que vemos en terapia y que además suele incapacitar más a las personas en su vida diaria, generando niveles altos de ansiedad e interfiriendo en su vida diaria.
Además de estas fobias comunes, existen muchos tipos de fobias, algunas pueden ser:
- Aracnofobia
- Dentofobia
- Emetofobia
- Equinofobia
- Hemofobia
- Galeofobia (miedo a los tiburones)
- Misofobia
- Nictofobia
Algunas de estas fobias pueden parecer irracionales, pero realmente pueden causar una gran angustia en la vida diaria de la persona.
Cómo se supera una fobia
- Identifica la situación u objeto temido: ¿Qué desencadena tu miedo? ¿Qué situaciones en concreto? ¿Qué características tienen en común aquello que te hace sentir miedo?
- Comparte tu miedo: Hablar sobre tu fobia puede ayudarte a encontrar otras personas que también les pueda pasar, encontrar apoyo en otras personas que le ocurra algo parecido
- Reflexiona sobre si es un miedo irracional: ¿Se corresponde con un peligro real? ¿es un miedo excesivo?
- Valida tus emociones: Normaliza que los síntomas que sientes son respuestas normales que tiene nuestro organismo de reaccionar al miedo. Comprender que estos síntomas suelen aparecer en algunas situaciones en las que sentimos miedo, forma parte del proceso para regular mejor estos síntomas y prestar más atención a lo que necesitamos.
- Practica técnicas de relajación y respiración: Aprende a controlar la respiración y a relajar el cuerpo, esto puede ayudarte a controlar la ansiedad y el miedo.
- Utiliza técnicas de visualización: Imagina que estás manejando con éxito la situación temida, esto va a ayudarte a encontrar recursos para esos momentos, generar confianza y a reducir niveles de ansiedad en tu organismo.
- Exposición gradual: Comienza afrontando el objeto o las situaciones que tep producen miedo, pero de forma gradual y controlada. Es importante que puedas sentir seguridad en cada exposición una vez acabada. Ve enfrentándote a situaciones nuevas que te produzcan un poco más de ansiedad, conforme te vayas sintiendo preparado y capaz.
- Elogiate por tus objetivos conseguidos: Es importante que vayamos siendo conscientes de nuestros logros y premiarnos también por aquello que vamos consiguiendo. Esto va a fomentar nuestra confianza en nosotros mismos y la sensación de control y capacidad.
Si has seguido estos pasos y aun así te resulta complicado afrontar esos miedos, manejar esos síntomas de ansiedad, etc.
Es importante que consultes con un profesional para que te ofrezca apoyo y pautas en tu proceso, así como poder trabajar técnicas de regulación emocional para poder utilizar en el proceso.
Puedes contactar con nosotras en psicologiamariapalau, que somos espertas en miedos y gestión emocional, para que podamos acompañarte en el camino, que sea más fácil y eficaz para ti.