En psicología, uno de los principales focos siempre ha estado en la importancia de la infancia y lo determinante que puede llegar a ser para nuestro desarrollo como personas adultas.
Uno de los conceptos que muchas veces hemos escuchado en psicologiamariapalau y resulta llamativo es “la niña interior” este, hace referencia a una parte esencial de nosotros/as a menudo olvidada, pero que ejerce una influencia significativa en nuestras vida y la forma de gestionarla.
Descubrir y sanar a nuestra/o niña/o interior puede abrir las puertas hacia una mayor comprensión de ti mismo/a, brindarte la oportunidad de elaborar heridas emocionales del pasado y gestionar de forma más funcional tus situaciones , y de esta forma poder vivir una vida más satisfactoria.
Una forma de conseguir enfrentar estas heridas emocionales es acudir a un psicólogo para adultos que te ayude a obtener las herramientas necesarias para saber gestionarlo de forma efectiva.
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¿Qué es la niña interior?
La niña interior es una representación simbólica de nuestra infancia, de todas las experiencias, emociones y recuerdos que hemos acumulado durante ese período crucial de nuestras vidas y de cómo esas vivencias de alguna forma nos definen y moldean en la actualidad.
Cuando crecemos, está claro que las cosas cambian y nosotras también, tenemos más herramientas y somos capaces de enfrentarnos a más cosas, pero esto no quita que el pasado siga formando parte de quién somos. De adultas puede haber situaciones más complejas y emocionales que despiertan esta niña interior en forma de emociones, pensamientos y sentimientos.
Estados del yo
Los «estados del yo» son un concepto psicológico desarrollado por el psicoterapeuta y psicólogo transpersonal estadounidense Richard Schwartz que propone que dentro de cada individuo existen principalmente tres partes, cada una con sus propias creencias, emociones y comportamientos. Estas partes o estados del yo interactúan entre sí y afectan en la forma en la que una persona se percibe a sí misma y se relaciona con los demás y su entorno.
- Parte niña: Representa a la parte vulnerable y sensible de la persona, es la que tiene las necesidades y emociones. También es la que se siente libre de explorar el mundo y de expresar su individualidad. Es nuestra creatividad e imaginación, y durante la adultez continua con nosotras.
- Parte madre o padre: en esta parte de nosotras tenemos recogidas todas las normas y creencias. Lo que yo “debería”de ser. Puede manifestarse como un diálogo o voc interna que nos critica y nos juzga, o por lo contrario, que nos comprende, nos consuela y nos guía. Es la parte que a veces boicotea a la niña.
- Parte adulta: es racional, objetiva y equilibrada. Es la parte responsable de la toma de decisiones basada en la lógica y la evaluación realista de las situaciones. Es la más ejecutora, práctica y eficaz.
Lo ideal es que estas tres partes de ti hagan equipo. La parte niña necesita tu atención, validación y espacio. Tiene que poder existir y es importante dejarla sentir, tanto cuando lo que siente es agradable como si no.
La parte madre tiene que exigir, pero también cuidar, consolar, guiar y ser flexible en sus normas cuando sea necesario. La parte adulta tiene que tener un buen desarrollo para poder convertirte en una persona independiente y capaz.
¿Por qué es importante conectar con la niña interior?
Conectar con tu niña interior es un proceso profundo, en ocasiones muy complicado, pero que puede tener un impacto significativo en tu bienestar emocional, mental y espiritual. Algunos de los beneficios son:
- Autoconocimiento y autoaceptación: Puede brindarte una oportunidad para conocer y entender mejor tus verdaderas necesidades, deseos y miedos. Este conocimiento profundo de ti mismo puede llevarte a una mayor autoaceptación y amor propio, lo que es fundamental para una vida emocionalmente saludable.
- Elaboración emocional: te permite abordar heridas emocionales enquistadas y profundas que pueden haber sido causadas durante la infancia. Al enfrentar y elaborar estas heridas, puedes liberarte del dolor emocional acumulado y comenzar a gestionar de forma más funcional tus emociones.
- Relaciones saludables: Cuando estás en sintonía con tu niña interior, puedes establecer límites claros y saludables en tus relaciones. Puedes comunicarte de manera más efectiva con los demás, escucharte, darte tu lugar y separarte de aquello que no te hace bien y no es tu responsbailidad.
- Creatividad y espontaneidad: La niña interior es naturalmente creativa y espontánea. Conectar con ella puede desbloquear tu creatividad y tu ilusión por la vida. Esto puede ayudarte a lanzarte a vivir nuevas experiencias, salir de tu zona de confort y encontrar pasatiempos o actividades que te hagan disfrutar.
- Reducción del estrés y la ansiedad: El comenzar a enfrentar las preocupaciones y miedos de tu niña interior de forma más funcional y desde la compasión, así como, escucharla y atender sus necesidades, puede ayudarte a reducir el estrés y la ansiedad.
- Aumentar tu empatía y compasión: puede ayudarte a desarrollar una comprensión más profunda y una mayor empatía hacia ti misma y hacia los demás. Esta empatía puede mejorar tus relaciones interpersonales y tu capacidad para ser un apoyo para ti y los demás.
¿Cómo comenzar a conectar y sanar las heridas de tú niña interior?
Como hemos comentado, la niña interior te avisa de que algo no va bien, de que estás sufriendo y la consecuencia de no atenderla y observar qué nos quiere decir ese malestar, llevará a que se haga más grande.
Es importante que prestemos atención cuanto antes y nos observemos, si no comprendemos que nos sucede es más probable que tengamos formas de gestionarse poco adecuadas.
Por tanto, la principal forma de comenzar a conectar y atender a tu niña interior es escucharte y abrirte a nivel emocional.
Todo lo que sientes está bien, no hay emociones malas, no eres exagerada, no eres dramática, no eres fría..si en estos momentos vieras a un niño o niña llorar, ¿le dirías que no llore? ¿Le ignorarias o le juzgarías?
No, seguramente tratarías de escucharlo, validarlo y entenderle. Justamente esto mismo es lo que necesitas tú y es como tienes que intentar tratarte. Algunas estrategias que pueden ayudarte con esto son:
- Atención plena (Mindfulness): La atención plena te ayuda a estar presente en el momento actual, lo que te permite ser más consciente de tus emociones y pensamientos y observarlas desde un lugar más sano y sin juicios.
- Diario emocional: Mantén un diario en el que hables desde el punto de vista de tu niña interior. Permite que exprese sus sentimientos, miedos, alegrías y necesidades. Esto te ayudará a comprenderla mejor y a responder de manera más compasiva a sus preocupaciones.
- Visualización creativa: Abre espacios en tu rutina para practicar la visualización, esta consiste en imaginarte a ti misma interactuando con afecto y cariño con tu niña interior. Visualizate abrazándola, consolándola y mostrándole amor incondicional.
- Terapia y apoyo profesional: Considera la posibilidad de hacer todo este trabajo con un terapeuta. El apoyo profesional puede proporcionar orientación y técnicas específicas para elaborar heridas emocionales, responder a tus necesidades y aprender formas más adecuadas de gestionar tus emociones.
En conclusión, conectar con tu niña interior es un acto de amor propio, y una forma de comenzar a relacionarte contigo mismo/a y con el mundo de forma más sana.