Hoy en nuestro blog de psicología vamos a explorar el significado de la autoexiencia. Esta puede encontrarse entre las habilidades personales de una persona, pero solo en caso de que esa exigencia no se acerque al perfeccionismo, lo que puede generar emociones desagradables, disminución de la autoestima, de la autoeficacia y aumento de la ansiedad. En estos casos nuestra terapia psicológica para adultos ha demostrado ser de gran ayuda para gestionar la autoexigencia.
Cuando alguien pone en práctica esta cualidad de forma excesiva y/u obsesiva, puede perjudicar gravemente a la persona y a los/las que la rodean, por esta razón, en este artículo aprenderás las ventajas e inconvenientes de la autoexigencia para regular tu niveles de forma correcta.
Contents
¿Qué es la autoexigencia?
En el ámbito personal, la autoexigencia es el esfuerzo que una persona se impone a sí misma para ser mejor en su rendimiento, es la búsqueda de la mejorar en todas las actividades.
En resumen, la autoexigencia es la búsqueda de la excelencia.
¿Cuándo se convierte la autoexigencia en un defecto?
La autoexigencia hace que nos presionemos hasta el punto de estar insatisfechos con cualquier cosa que hayamos conseguido, esto impide que nos sintamos bien con los pequeños éxitos, y a la larga nos desmoronamos. Además, la autoexigencia nos lleva a ser más impacientes y a tener expectativas muy altas.
Cuando los resultados que esperamos y deseamos no llegan, es muy probable que nos desanimemos. Así, es más probable que abandonemos y nos sintamos frustrados, abandonar la autoexigencia puede ayudarnos a conseguir nuestros objetivos sin frustrarnos.
Cómo detectar los primeros síntomas de alta autoexigencia:
Los síntomas de la existencia de autoexigencia son diversos, de entre todos los posibles síntomas de la autoexigencia hemos seleccionado los 8 más comunes:
Ser perfeccionista
La gran mayoría de las personas excesivamente exigentes también sufren la doble cara del perfeccionismo, ser autoexigente significa poner las expectativas demasiado altas, tener objetivos poco realistas te hace pensar que no eres digno.
No te permites cometer errores.
Con frecuencia, las personas exigentes se niegan a sí mismas la posibilidad de no cometer errores. Tanto es así que, al exigirse demasiado, procrastinan la mayoría de las tareas u objetivos por miedo al fracaso o al error.
Autocrítica
En efecto, si eres una persona exigente, la autocrítica es continua en tu día a día. Tanto es así que la mente y este discurso dañino perturbarán todos los aspectos de tu vida.
Establecer objetivos en función de las expectativas de los demás
Hay muchos casos en los que la sobreexigencia viene de la mano de intentar complacer a los demás, ser tan autoexigente (sobre todo en aspectos que pueden no motivar) puede llevar a la depresión.
Intentar complacer a la gente
La autoexigencia se relaciona a veces con la importancia que damos a lo que piensan o dicen de nosotros, tanto, que las personas autoexigentes anteponen las necesidades de los demás a las suyas propias.
Comparación
La autoexigencia puede ser excesiva, las personas que se autoexigen demasiado sufrirán una baja autoestima.
Asumir demasiado
Asumir demasiadas tareas puede ser uno de los signos significativos de que te exiges demasiado a ti mismo. Además, este sobreesfuerzo deja de lado los descansos, la relajación y el ocio necesarios para disfrutar de la vida.
La necesidad constante de tener un logro
Las personas que se exigen demasiado confían en sus logros o éxitos para sentirse valiosas. De este modo, asocian erróneamente el mérito con la autoestima.
Exigirse demasiado tiene varias consecuencias en la salud emocional. Las personas que sufren una autoexigencia excesiva luchan con patologías psicológicas como la depresión, la ansiedad y el exceso de estrés. En estos casos es fundamental acudir a un especialista en salud mental.


¿Cómo reflejan los líderes la autoexigencia?
Un buen líder encuentra el equilibrio entre exigir y conceder libertad y autonomía a sus empleados. Por tanto, la exigencia de un líder hacia sus empleados debe ir acompañada de amabilidad y capacidad de negociación.
Las características más importantes que comparten los líderes autoexigentes son:
- Relacionan el ser con el hacer.
- Buscan primero su aprobación y después la de los demás.
- Una persona autoexigente busca cumplir tareas o alcanzar objetivos.
- Identifica sus errores y trabaja para mejorarlos.
Un exceso de excelencia autoimpuesta puede provocar trastornos emocionales y de personalidad, por lo que es necesario tener el cuidado necesario con uno mismo.
¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de la autoexigencia?
Como hemos visto la autoexigencia puede tener ventajas e inconvenientes al mismo tiempo, pasamos a continuación a hacer un listado de puntos positivos y negativos de la autoexigencia:
Ventajas de la autoexigencia
- Alta eficiencia
- Resultado pulido
- Atención al detalle
- Menos arreglos
- Asumir retos
- Los perfeccionistas son grandes organizadores
- Excelentes para detectar errores
Desventajas de la autoexigencia
Los estudios también han descubierto que las personas autoexigentes tienen mayores niveles de estrés, agotamiento y ansiedad. Así que, aunque ciertos aspectos de la autoexigencia pueden ser beneficiosos en el trabajo, las tendencias perfeccionistas también pueden afectar claramente al estado de ánimo de los empleados.