La mayoría de los padres y madres creen que el bienestar de sus hijos/as es una prioridad y con frecuencia es lo que tienen en mente a la hora de separarse. Los padres que son sensibles a las necesidades de los niños y niñas, que pueden dejar de lado sus diferencias y que pueden cooperar para beneficio de sus hijos/as, tienden a tener hijos/as que prosperan y que enfrentan bien la separación.
No obstante, una separación o divorcio, es un proceso emocionalmente muy complejo, en el cual resulta difícil gestionar las propias emociones y lidiar y facilitar a la vez el afrontamiento de la situación por parte de los hijos/as.
Además, la infancia y la adolescencia son etapas de la vida en la que se puede ser especialmente vulnerable. Todo lo relacionado con el área familiar puede llegar a tener un gran impacto, ya que es el círculo de socialización en el que han establecido sus primeros vínculos afectivos, y los padres y madres generalmente son sus principales referentes y figuras de apego y protección.
Esto no quiere decir que no tengamos que finalizar la relación para evitarles el dolor, el bienestar de los adultos también es importante, además, difícilmente se puede ofrecer una crianza adecuada en un clima en el que la pareja no es feliz.
Por este motivo, si te encuentras en una situación en la que te estás planteando terminar con tu relación de pareja, y tienes hijos con ella, priorizate a ti mismo/a y no te machaques. Te animo a continuar leyendo ya que en este blog de psicología de psicologiamariapalau compartiremos contigo varios consejos que pueden ayudarte a gestionar esta situación.
10 Claves para ayudar a tu hijo/a
Como hemos dicho, enfrentar la separación de los padres puede ser un momento difícil y desafiante para un/a niño/a. Aquí hay algunas sugerencias para ayudar a tu hijo/a a manejar esta situación de la mejor manera posible:
- Comunicación abierta: Habla con tu hijo/a de manera honesta y adecuada a su edad sobre la situación. Asegúrate de que se sienta escuchado y comprendido. Responde a sus todas preguntas de manera clara y tranquilizadora. Es importante reducir la incertidumbre lo máximo posible, no dar lugar a preocupación y que comprendan todo.
- Mantén la rutina: Intenta mantener la estabilidad en la vida diaria de tu hijo/a tanto como sea posible. Mantener una rutina regular puede proporcionarle un sentido de seguridad y previsibilidad.
- Evita culpas: No culpes ni critiques al otro progenitor frente a tu hijo/a. Es importante que no se sienta atrapado en medio de conflictos entre los padres. Intentad mantener una actitud centrada en la búsqueda del consenso y acuerdo.
- Permítele expresar sus emociones: Anima a tu hijo/a a expresar sus sentimientos y emociones. Permítele llorar, hablar o escribir sobre lo que siente. Asegúrate de que sepa que está bien tener emociones y que está seguro de compartir sus pensamientos contigo.
- Apoyo emocional: Bríndale mucho amor, atención y apoyo emocional durante este período. Puede ser útil involucrar a otros adultos de confianza, como abuelos, tías o amigos cercanos, para proporcionar un sistema de apoyo adicional.
- Ir a terapia: Considera la posibilidad de buscar la ayuda de un profesional de la salud mental, como un terapeuta infantil, si notas que tu hijo/a está luchando para manejar sus emociones o adaptarse a la situación. También contempla la opción de acudir a terapia individual si eres tú quien puede necesitarlo.
- Flexibilidad y adaptación: Reconoce que cada niño/a reacciona de manera diferente a la separación de sus padres. Ajusta tus enfoques según sus necesidades y su personalidad.
- Cuida de ti mismo/a: Recuerda que también es importante cuidar de ti mismo/a durante este proceso. Si estás emocionalmente estable, estarás mejor preparado/a para apoyar a tu hijo/a.
- Tiempo para ambos progenitores: Trata de asegurarte de que tu hijo/a pueda pasar tiempo con ambos padres de manera regular, siempre que sea posible. Mantener una relación positiva con el otro progenitor puede beneficiar el bienestar emocional del niño.
- Mantén la esperanza: Aunque la separación es un desafío, recuerda que con el tiempo y el apoyo adecuado, la mayoría de los niños y niñas pueden adaptarse y encontrar formas de manejar sus emociones.
Recuerda que cada niño/a es único/a, por lo que es importante estar atento a las señales y necesidades específicas. La paciencia, el amor y el apoyo constante son fundamentales para ayudar a tu hijo a enfrentar la separación de sus padres de manera saludable.
Si sientes que la situación es demasiado abrumadora, no dudes en buscar ayuda profesional de un psicólogo de parejas especialista en rupturas.
Nosotras en psicologiamariapalau contamos con una psicóloga especialista en terapia infantil que puede ayudarte como adulto/a gestionar esta situación adaptándola a tu hijo/a y/o trabajando con él/ella directamente.
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